Durante un tiempo los motores 175 cc fueron los protagonistas de la producción italiana de motocicletas, y privilegiados desde el punto de vista de la competición. Ahora son solo una clase olvidada.
En Italia, la primer mitad de los años 50 quedó marcada por una gran auge de las motocicletas, con necesidad de nuevos modelos y gran cantidad de marcas establecidas. Resulta prácticamente imposible enumerar la cantidad de innovaciones, experimentos y empresas desarrolladas durante esa época.
Artículo muy interesante sobre la marca y su historia, parte de la revista Motociclismo d’Epoca del mes de Junio de 2016. La misma se encuentra en italiano.
Alpino fue una de las marcas fundadoras de un proceso que caracterizó al motociclismo italiano de la segunda postguerra: la aparición y furibundo desarrollo de los micro-motores.
Desde principios de 1945, en Stradella (ciudad ubicada a unos 40 kilómetros al sur de Milán), Paolo Trespidi entregaba sus motores auxiliares para bicicletas construidos por su empresa Motobici. Trespidi no era un recién llegado al terreno motociclístico: en 1925 había diseñado, y desde 1926 producido una 250 2T muy bien conceptuada en el ambiente; y en 1929 también una 175 técnicamente similar.
En todo caso, parece que el vendaval de la crisis mundial de los años 30 lo dejó fuera de carrera.
El sombrero de los “cazadores alpinos “ italianos, un cerrado cuerpo de élite con amplia participación “in situ” en la primera guerra mundial, fue el emblema elegido por Trespidi para graficar su marca.
